User:Berumen

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J. Jesús Félix. En 1959, el periodista y dibujante diseñó y pintó un escudo por encargo de la Cámara de Comercio Local. Cuando el Profesor Fernando Robles fue presidente (1968-71) encargó al Síndico Municipal, Don Juan de Santiago Silva que elaborara un escudo para Jerez. Don Juan recordó que existía el escudo que realizara el Sr. Félix, y con su anuencia fuera utilizado como oficial. Jesús Félix Valdez Nació en la Lechuguilla, Tepetongo, Zacatecas, el 17 de junio de 1913 fueron sus padres Pedro Félix de la Torre y Ma. Guadalupe Valdez de la Torre. Tuvo tres hermanos: Francisco, Ma. de la Luz y José. A la edad de seis años se trasladaron a Jerez en donde estuvieron un corto tiempo, de ahí se fueron a Zacatecas y posteriormente a Guadalupe, en este lugar cursó la primaria. Regresaron a jerez y aquí fue en donde comenzó a dar muestra de su habilidad para dibujar caricaturas. En este pueblo mágico conoció a la que fue su esposa, la Sra. Ma. Luisa Ortiz González con quien tuvo trece hijos: Javier, Julieta, Guillermo, Ma. Luisa, Ma. Guadalupe, Rosaura, Pedro, Cristina, Jesús, Rosario, Delia, Jorge y Martha Patricia. Aprendió el oficio de sastre en la capital del Estado con el Sr. Coronel, por las tardes se dedicaba al dibujo y sus amigos lo visitaban para que les hiciera su caricatura (no les cobraba). Le gustaba la lectura, tenía su pequeña biblioteca de obras clásicas y poesía. Le gustaba escribir pues tenía gran imaginación y facilidad narrativa. Recibió la invitación del famoso caricaturista del periódico Excelsior, el chango Cabral (así firmaba) y de la Sra. Rosa Ma. de la Torre Félix (prima de Don Jesús) ella era pintora y coreógrafa en el Palacio de Bellas Artes, Sin embargo Don Jesús nunca quiso salir de su Jerez. Murió a la edad de ochenta años el 21 de dic de 1994. Con gran respeto y admiración lo recuerdan sus hijas, hijos, nietas y nietos que cariñosamente le decían Papá Chuy. Este escudo simbólico tiene un gran significado, ya que cada uno de sus componentes representa en sí un episodio de la vida social de este pueblo, pero que en su conjunto unifica, conjuga a dos culturas diametralmente opuestas, tanto en historia, tradición, creencias, idiomas y raza, razón por la cual, es interesante analizarlo detenidamente. En primer lugar en la parte superior sobresale el símbolo del cristianismo. Precisamente en el área del pueblo aborigen es la implantación de una nueva deidad, pero no es un hecho que ocurre sin la resistencia propia de alguien que se ve inesperadamente asaltado. Su color negro es para hacerla resaltar en el lienzo de color amarillo, este colorido nos induce a pensar en el fervor con que se acepta años después y como ahora ya se considera la más grande riqueza espiritual. Un pergamino de color gris sirve de marco a esta sagrada imagen, considerada como Madre y Reina de los jerezanos, se posa sobre el pedestal en el que se lee claramente VILLA DE XEREZ. En una área triangular de color verde, asoma unos brazos de guerrero en pleno combate, simbolizando a los zacatecanos que al verse invadidos defienden con denuedo la osadía del invasor; el fondo verde es el que da nombre a ese pueblo: Zacatlán, es decir, lugar de zacate. Los adornos en los brazos indican su costumbre de pintarse el cuerpo para entrar en combate, el arco y la flecha las armas que para ello utilizaban. La barrera que divide a ambos pueblos, el lugar de encuentro (Jerez). En el margen derecho sobresale el hombre peninsular que consciente de su superioridad hace frente al enemigo con hidalguía; inmediatamente nota la gran diferencia técnica y militar de lo americano con lo europeo. El cielo azul que cubre el extranjero, sus andanzas por medio mundo. El escudo jerezano, es pues, la conjunción de la osadía con la rebeldía, la del pueblo laborable con la del aventurero, la del politeísmo sintetizado en la adoración a un solo Dios, eso representado en la imagen de la Virgen de la Soledad. En suma la contradicción inmersa en una sola expresión: la del jerezano actual. Por ultimo una frase del orador y literato romano Marco Tulio Cicerón (106-43 a. c.) "Tempus Fugit Laboremus" (El tiempo se va, trabajemos).

Description
Español: D. Jesús Félix
Date 12-12-2012
Source Self-photographed
Author Humberto Damian Trujillo Felix
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